VIRÚ.-
La primera semana de julio de cada año, Virú celebra una de las fiestas patronales más
antiguas de esta parte de la región, el Señor de La Sangre, tradición que se
recuerda año a año desde 1819, en esta oportunidad los responsables son los
mayordomos Luis Carlos Mantilla García y
Máximo Escobedo Soles, El Sindico Miguel Antonio Aguilar Esquerre y como
alcalde Julissa Gonzales Vela.
El primer mayordomo Luis
Carlos Mantilla García señalo que la fiesta se inicio el 26 de junio con el
arribo de la imagen del Señor de la Sangre de Montegrande, al Centro Poblado de
San José, posteriormente continuo su recorrido hasta llegar la ciudad de Virú.
El viernes 29 de junio
es un día especial conocido comúnmente como la entrada de bandas, a las 3:00 pm
ingresan por la avenida principal de la ciudad, las bandas de Músicos, los
grupos de danzas típicas, autoridades, mayordomía y publico en general, por la
noche es la celebración del santo rosario y retreta en la plaza de armas acotó.
El sábado 30 de junio a
las 5: 00 am es el clásico y resonante saludo de repique de campanas y quema de
fuegos artificiales y cohetes de arranque, a las 7:00 pm misa de vísperas a
cargo del Reverendo Párroco Mario Gonzales Gavidia, a las 12:00 pm la quema de
doce castillos de quince, cinco tres y dos cuerpos.
DÍA
CENTRAL
La misa central es al
medio día acto litúrgico que se llevara a cabo en la Iglesia San Pedro de Virú,
a las 5:00 pm la solemne procesión del Señor de la Sangre de Virú y Huamanzaña
HISTORIA DEL SEÑOR DE LA
SANGRE
La festividad del Señor de la Sangre fue fundada
el domingo 2 de julio de 1819, por lo que se instituyó su celebración el primer
domingo de julio de cada año. A pesar que ya han transcurrido 192 años, hoy por
hoy, la población viruñera venera y festeja con mucha devoción a su Santo
Patrón. De allí que esta festividad sea considerada como una de las
ferias religiosas más importantes de nuestra provincia.
HIPÓTESIS SOBRE SU LLEGADA
Cuenta la historia que se quemó la Iglesia de
Huamanzaña y como las imágenes quedaron abandonadas, los viruñeros de esa época
trasladaron las imágenes a Virú Se trataba de la Preciosísima Sangre de Nuestro
Señor Jesucristo y San Juan Bautista.
La imagen de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, después de varios retornos a su lugar de origen se quedó en Virú. Pero la imagen de San Juan Bautista fue llevada a Buenavista donde le construyeron una capilla y posteriormente un templo.
Versiones de la época señalan que el Señor de la Sangre se plantó al final de la Huaca Santa Clara, por el camino a Chequepe, en donde lo fieles tuvieron que construirle su nueva capilla. Aunque en principio le edificaron un altar de esteras, caña brava y pájaro bobo y toda la noche del domingo velaron a la imagen.
El día lunes, muy tempranas se bajó a la imagen y las señoras que ya iban al mercado con su manta negra a la espalda y la canasta bajo el brazo, ya no tuvieron que seguir sin fe y sin devoción porque la procesión del serranito, seguía avanzando. Entonces corrieron a la acequia grande a traer flores silvestres, y las fueron regando por donde pasaba la imagen.
Otras de las versiones, dice que la imagen fue encontrada en una especie de capilla hecha en una barranca. De igual modo, explican que los pobladores locales trajeron las imágenes porque a Huamanzaña llegó un hacendado que no creía en la religión católica y había ordenado destruir las imágenes.
El
2011, La festividad en homenaje al
Señor de la Sangre tuvo presencia de los medios de comunicación nacionales como
es el programa “Costumbres” de Tv Perú, conducida por Sonaly Tuestas y todo su
equipo, quienes gravaron los principales acontecimientos y costumbres de esta
festividad que se celebra desde el año 1819